¿Necesitas limpiar tu escritorio? ¡Así es como debes hacerlo!

 

Si te sientes culpable por comer en tu escritorio moderno o simplemente quieres combatir el desorden del día a día que se acumula en tu espacio de trabajo, una limpieza adecuada puede ayudarte a mantenerte productivo y mejorar tu salud. Si tipeaste en el buscador «cómo limpiar mi escritorio», ¡en el siguiente artículo te damos algunos útiles consejos!

Beneficios de un escritorio limpio

Los beneficios de mantener tu escritorio limpio y ordenado, así como darle una buena limpieza de manera regular, son los siguientes:

• Mayores niveles de productividad en el trabajo.
• Mejor organización.
• Reducción del riesgo a contraer alguna enfermedad o virus.
• Satisfacción personal por tener un espacio de trabajo limpio.
• Nivel de motivación alto.

Antes de limpiar tu escritorio

Antes de empezar con la limpieza, asegúrate de retirar todo de tu escritorio. Bota la basura y apila todos los papeles para ordenarlos más tarde. También, debes sacar cualquier objeto personal y guardarlo en otro lugar para que tu escritorio esté despejado. De esta forma, limpiarás más fácilmente. 

¿Cómo limpiar tu escritorio?

 

 

Primero, desenchufa todo; no solo basta con apagar los aparatos. Los dispositivos electrónicos apagados suelen llevar una pequeña corriente de reserva que puede volverse peligrosa o dañina si los circuitos entran en contacto con los líquidos de limpieza. 

También, es más fácil mover las cosas si aún no están conectadas a una toma de corriente. Por eso, toma la precaución adicional de desconectar correctamente los monitores, teclados, mouses, ventiladores de escritorio y otros dispositivos electrónicos antes de continuar.

¿Deberías usar toallitas desinfectantes o jabón?

Una vez que hayas apagado todo, comienza con las cosas que están en la parte superior de tu escritorio antes de empezar con los diversos accesorios de computación y el contenido de los cajones del escritorio. 

Los equipos de oficina que usas más a menudo, como lapiceros, grapadoras, tijeras y calculadoras deben limpiarse completamente con toallitas desinfectantes antibacterianas a base de alcohol.

Limpia los objetos alrededor de tu escritorio que es menos probable que toques, como lámparas, ventiladores y macetas. Asegúrate de limpiar todos los lados de cada artículo y dejar que se sequen durante cinco minutos antes de colocarlos de nuevo en el escritorio.

Cualquier accesorio de escritorio que tenga una forma demasiado incómoda para limpiarlo adecuadamente con una toallita desinfectante debe lavarse con jabón suave para platos y agua tibia. Los organizadores de escritorio, portalápices y archivadores de plástico se pueden limpiar con agua tibia y jabón, y dejar secar al aire libre.

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Desinfecta la superficie de tu escritorio

Si has limpiado completamente tu escritorio, esta es tu oportunidad para limpiar cada superficie con un paño seco para eliminar el polvo acumulado. 

Luego, puedes usar toallitas desinfectantes para limpiar toda la superficie, asegurándote de prestar especial atención a las partes del escritorio que tocas más a menudo, tales como los bordes y las áreas que rodean el teclado. Para una desinfección eficaz, deja que las superficies se sequen durante unos cinco minutos.

¿Cómo limpiar aparatos electrónicos, muebles y artículos personales?

1. La pantalla de tu computadora

Como regla general, no apliques productos de limpieza directamente en la pantalla. Los líquidos pueden penetrar la fina capa exterior de la pantalla, filtrarse en el monitor y causar daños, opacidad y decoloración. 

En su lugar, humedece un paño de microfibra limpio con agua fría y escúrrelo bien antes de limpiar la pantalla con movimientos largos de lado a lado. Evita el uso de toallas de papel o paños de limpieza más ásperos, ya que pueden rayar u opacar la pantalla. 

2. El teclado

 

 

Todas las veces que comes en tu escritorio pueden pasar factura a tu fiel teclado. Sostén el teclado boca abajo sobre un bote de basura. Golpea y agita con firmeza para sacar las migajas, semillas y otros desechos desagradables que pueden haber caído entre las teclas. Mientras inclinas el teclado, usa una lata de aire comprimido entre las teclas para eliminar cualquier residuo.

Una vez que hayas eliminado las partículas más grandes de suciedad, lava el teclado utilizando toallitas desinfectantes o un agente de limpieza a base de alcohol. Pasa la toallita o tela entre y alrededor de las teclas individuales. 

Asegúrate de que el paño que estés usando no esté demasiado mojado y deja secar el teclado durante al menos 10 minutos después de la limpieza, ya que el exceso de líquido puede dañar el equipo bajo las teclas.

3. El mouse

Si bien los mouses ópticos son mucho menos susceptibles a la acumulación de suciedad que los mecánicos y más antiguos, aún así pueden acumular suciedad y bacterias en la parte inferior y donde el mouse entra en contacto con tu mano y dedos.

Para limpiar tu mouse, colócalo en una toalla de papel para atrapar cualquier suciedad que caiga. Luego, pasa un palito de dientes o una nota adhesiva plegada a lo largo de los pequeños espacios entre los botones y el cuerpo del mouse para retirar cualquier suciedad acumulada.

Hasta este punto, te hemos mostrado algunos consejos para limpiar tu escritorio y artículos de oficina. Estas ideas simples pero útiles pueden ayudar a mantener cualquier tipo de  escritorio limpio durante todo el año. Ahora tendrás más tiempo y energía para trabajar o estudiar. ¡Esperamos que esta información te haya resultado interesante y útil!

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