Conoce 4 tipos de colchones

  

Comprar un colchón nuevo es emocionante, sobre todo si han pasado varios años desde la última vez que adquiriste uno. La ciencia ha avanzado mucho en los últimos años y las nuevas innovaciones pueden permitirte encontrar el producto que mejor se adapte a tus necesidades específicas de sueño.

Sin embargo, sería bastante costoso determinar cuál es el mejor para ti basándote estrictamente en tu experiencia personal. Hay muchos tipos de colchones disponibles en el mercado. Si no sabes cuál escoger, no tienes de qué preocuparte. A continuación te mostramos los más comunes para ayudarte a tomar una decisión de compra más informada.

4 tipos de colchón

1. Colchón de muelles ensacados

Cuando piensas en los colchones de muelles ensacados, puedes imaginarte de niño saltando sobre una cama chirriante que obviamente tenía algún tipo de metal en su interior. Este tipo de colchón está hecho con un sistema de soporte de bobina de acero. 

Si bien es posible que recuerdes haber dormido en este tipo de colchón, es menos probable que hayas visto cómo se ve por dentro. Estos productos utilizan resortes que están conectados en una sola unidad y, a medida que aumenta el número de espirales, mayor es la calidad del sueño.

2. Colchón de espuma

 

 

Los colchones de espuma son muy populares y es muy probable que hayas probado al menos algún tipo de herramienta de relajación que utilice tecnología de espuma. Famosa por su capacidad para envolver a sus usuarios y hacerlos sentir cómodos, hay una serie de industrias que aprovechan esta innovación, tales como: 

• Calzado
• Automotriz
• Muebles

Si te gusta la sensación de hundirte en tu cama, entonces un colchón de espuma puede ser lo que estás buscando. Estos productos son conocidos por su facilidad para contornear el cuerpo y regresar a su forma original cuando se libera la presión. Piensa en aquel material que, cuando se presiona con la mano y se libera, deja una impresión por unos segundos.

3. Colchón de látex

Los colchones de látex se consideran una opción más natural, ya que el látex natural es un subproducto de la savia de un árbol de caucho. Si estás buscando un colchón natural, opta por el látex natural, en lugar del látex sintético.

Este material es similar a la espuma viscoelástica en el sentido de que ofrece alivio de presión y contorneado, pero no tanto como lo hace la espuma viscoelástica. El látex proporciona más rebote, por lo que si eliges espuma viscoelástica o látex es simplemente una cuestión de preferencia. 

Si te gusta hundirte profundamente en un colchón, te gustará más la espuma viscoelástica. Sin embargo, si deseas algo que rebote y retenga menos calor, es mejor con un colchón de látex.

4. Colchón híbrido

 

  

Los colchones híbridos son cada vez más populares, ya que tienden a combinar lo mejor de ambos mundos. Consigues el apoyo y el rebote de un colchón de muelles ensacados con la comodidad y suavidad del látex o la espuma.

Por lo general, habrá una capa de resortes en espiral en el fondo y una a tres capas de látex o espuma en la parte superior. La ventaja de un colchón híbrido es que puedes obtener una experiencia más personalizada. Debes investigar todas las opciones disponibles antes de tomar una decisión, pero hay para todos los gustos.

Por ejemplo, si deseas un rebote elástico y mantenerte fresco toda la noche, tendrás que buscar un colchón que tenga espirales en la parte inferior, espuma viscoelástica en la parte superior y algún tipo de infusión de gel o cobre o una estructura de espuma de celda abierta para mejorar la transpirabilidad. 

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¿Es hora de renovar tu colchón?

¿Cómo saber si la cama donde estás durmiendo es la indicada? Si te levantas por la mañana, tienes un poco de dolor de espalda baja, te estiras y se te pasa en 15 o 30 minutos, significa que estás en el colchón inapropiado. Por el contrario, el colchón correcto es uno en el que no sientes presión, casi como si estuvieras flotando en el aire. 

Si estás buscando un colchón nuevo, los expertos sugieren que lo prueben en la tienda y te acuestes en cada colchón en la posición en que normalmente duermes. Pasa por lo menos entre 10 a 15 minutos sobre él. Cuanto más puedas replicar la forma en la que duermes en el colchón, mayores serán tus posibilidades de elegir el correcto.

Hasta aquí, te hemos mostrado las distintas variedades de colchones que existen. Ahora ya sabes qué tipo de colchón es mejor para dormir. Recuerda analizar bien tus opciones y elegir el que mejor se adapte a tus necesidades. Una vez que tengas tu colchón nuevo, notarás la diferencia al descansar luego de un largo día de trabajo.

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